1. Pelar las patatas
2. Chascar las patatas, introduciendo el filo del cuchillo en la patata, rompiéndola, arrancando el trozo de patata. Procurar que todos los trozos sean más o menos del mismo tamaño
3. Poner los trozos de patata en un recipiente de silicona para cocer al vapor apto para microondas, con un poco de agua, tapar y cocer 4 minutos a máxima potencia.
4. Sacar el recipiente de silicona del microondas, destapar con cuidado, mover los trozos de patata con la ayuda de una cuchara. Tapar el recipiente de silicona y volver a meter en el microondas, otros 4 minutos aproximadamente.
5. Transcurrido este tiempo, sacar el recipiente de silicona del microondas, pinchar algún trozo de patata con un tenedor y comprobar el punto de cocción. Si están en su punto sacar, si necesitaran un poco más de tiempo y poniéndole recipiente de silicona con las patatas dentro en intervalos de un minuto, hasta conseguir el punto que nos guste.
6. Sacar las patatas del recipiente de silicona, escurrirles el agua.
7. Poner un chorreón de aceite de oliva a calentar en una sartén
8. Añadir las patatas e ir dándoles vueltas hasta que se vayan dorando un poco. Añadir otro poco de aceite de oliva si fuese necesario. Poner una pizca de sal, no mucha, porque luego le añadiremos la salsa de queso
9. Una vez doradas las patatas, sacar de la sartén y reservar.
10. Mientras se van dorando las patatas en la sartén, coger otra sartén, poner la nata a calentar y añadir el queso parmesano. Calentar y remover con la ayuda de una cuchara de madera hasta que se integren ambos ingredientes y se forme la crema.
11. A la hora de servir, poner de base las patatas, encima echar la crema de queso, encima de ésta colocar los mejillones en escabeche escurridos. Por último poner un poco de perejil picado por encima.

¡Y a disfrutar!